Electrocultura: Energía gratis del Cosmos para los cultivos
Electrocultura: Energía gratis del Cosmos para los cultivos
El electrocultivo es una antigua técnica redescubierta a mediados del siglo XIX y, lamentablemente, hoy en día casi olvidada, que podría mejorar mucho la producción de alimentos, así como la calidad de vida, en general, de los seres vivos. Según la definición actual del diccionario, la electrocultura es la aplicación de la electricidad a la agricultura, con el fin de mejorar y aumentar la producción. Ampliando el concepto a la realidad de su práctica, consiste en el manejo de la energía terrestre y cósmica para la fertilización de los cultivos, mejora de rendimientos y sanación de plantas, animales y seres humanos.
Estudios sobre electrocultivo y sus usos
Entre 1850 y la actualidad, más de 600 científicos de todo el mundo han experimentado, estudiado y documentado los efectos de los campos eléctricos, magnéticos y de frecuencia en las plantas. De estos estudios y su aplicación práctica destaca que:
- Plantas, semillas, animales y humanos son todos ecosistemas afectados por campos eléctricos y magnéticos.
- Trabajando en ciertos umbrales de potencia y tiempo es posible incrementar el desarrollo de la planta y todo su biorritmo/sistema inmunológico, con mayor resiliencia y mayor resistencia a heladas y sequías.
- Se observa una mejora cuantitativa y cualitativa de la producción a nivel de flores, frutas y hortalizas.
- Se produce un aumento en el porcentaje de germinación.
- Existe una energía siempre disponible que nutre las formas vitales, sin tener que añadir continuamente materia orgánica y alimento.
- Mejora las condiciones atmosféricas.
- Disminuye la fuerza de las tormentas.
- Atrae lluvia a los campos secos.
- Mejora el estado psico-físico de personas y animales.
- Protege las plantas de enfermedades e insectos.
- Reduce drásticamente el uso de fertilizantes y pesticidas.
Las técnicas de la electrocultura
El electrocultivo y/o magnetocultivo es un conjunto de técnicas que utilizan la electricidad, el magnetismo y las fuerzas cósmico-telúricas para ayudar al crecimiento de las plantas, sensibles a estas energías.
Mientras que la magnecultura se refiere más específicamente a las influencias magnéticas, la electrocultura hace uso de diferentes técnicas, que se han desarrollado a lo largo de los siglos con el uso de antenas, imanes, pirámides, cables eléctricos, pilas naturales, polvo de roca con carga magnética o eléctrica, etc.
Los principios básicos de la electrocultura
En la electrocultura es fundamental observar e interactuar porque cada planta es única. Se utiliza energía libre (sol, viento, campo electromagnético terrestre), siempre disponible, para mejorar el biorritmo vital. Como resultado, se produce un aumento notable en la producción y en la mejora de la diversidad. Son técnicas de bajo costo, fácilmente disponibles y construibles en cualquier lugar. Se aplica la regla del reciclaje, reanimando metales, objetos de desecho (por ejemplo, cables eléctricos de sistemas antiguos, electrodomésticos desechados).
El electrovegetómetro
El dispositivo nombrado » électrovegetomètre» fue un invento del físico francés y miembro de la Real Sociedad de Ciencias de Montpellier, Abad Bertolon (1780) ”.
https://es.frwiki.wiki/wiki/Pierre_Bertholon_de_Saint-Lazare
Un siglo más tarde, el electrovegetómetro fue utilizado por el Hermano Paulin (1893), director de «l’école d’Agriculture de Beauvais», una institución francesa de gran renombre, muy reconocida en Francia y en el extranjero. Paulin fue el creador de la “géomagnétifère
El «electrovegétometro» es una antena colocada en un poste y conectada con un hilo de hierro que se entierra en el suelo orientado hacia los polos. Este dispositivo de electrocultura permitió reemplazar los fertilizantes químicos y orgánicos de la época, obteniendo resultados impresionantes. En Francia, se instalaron decenas de antenas para fertilizar los campos en el primer tercio del siglo XX.
El pionero, Justin Christofleau
Se considera padre de la electrocultura a Justin Christofleau, un ingeniero e inventor francés, Caballero de la Orden del Mérito Agrícola, nacido en 1865 y fallecido en 1938, en La Queue-les-Yvelines.
Inspirado por el trabajo del abad Bertholon y sus sucesores, mediante el «electro-magnético terro-celeste» logró aumentar y facilitar las cosechas sin recurrir a fertilizantes químicos (nitratos, fosfatos, potasa) y sin añadir compost, que, según él, se vuelven innecesarios. Con sus inventos, también ayudó a salvar plantas y árboles gravemente enfermos.
Estos experimentos, realizados en su propio jardín, a veces llamado huerto eléctrico, a menudo fotografiados, visitados y descritos en artículos de periódicos, marcaron a muchos de sus contemporáneos y le hicieron muy conocido en Francia. En su haber cuenta con un buen número de interesantes patentes, no sólo en el campo de la electrocultura, sino también en el del biomagnetismo y la producción industrial.
Su discípula más aventajada fue Léonie-Gabrielle Reboisson (1894-1994), que presentó una primera patente en los años 1920 y luego una segunda en 1942 por uno de los dispositivos enterrados de Christofleau, que ella mejoró.
Otros pioneros del electromagetismo aplicado a la agricultura
Georges Lakhovsky, y su antena de circuito oscilante (1934); Marcel Violet, y la aplicación de la cera de abeja a las antenas de tierra; Philip S. Callahan, y sus investigaciones sobre el paramagnetismo y las ondas Schumann; Rudolf Steiner y la biodinámica, o el mismo Nikola Tesla y su Energía Libre, son algunos de los estudiosos que profundizaron a lo largo del pasado siglo en la aplicación de los campos eléctricos, biomagnéticos y telúricos de la atmósfera terrestre y el cosmos en la agricultura, la ganadería y en el propio ser humano.
Relacionado con todo ello también está la geobiología, la alquimia, el uso de pirámides metálicas, los mundos invisibles en los que trabajan chamanes, druidas, etc.
Sin embargo, a pesar de la evidencia mostrada por tantos autores a lo largo de los siglos, estas técnicas son ignoradas hoy en día. Organizaciones internacionales, universidades y prestigiosas escuelas de agricultura son cómplices de una campaña de desinformación masiva, cuando no de desprestigio y ocultamiento. A veces, simplemente por desconocimiento; otras, por omisiones de quienes saben, retienen y ocultan la información.
Existen varios factores que confirman que las técnicas de electrocultura fueron ignoradas, denigradas y archivadas de manera deliberada, aproximadamente desde 1930.
Las técnicas de electrocultura dejan a los fertilizantes químicos u orgánicos de lado, ya que son obsoletas. Una vez instalado un dispositivo de electrocultura en un campo, el agricultor se olvida del uso de insumos como, fitosanitarios y fertilizantes durante años o décadas. En consecuencia, y gracias al poder del dinero, multinacionales, instituciones educativas y gobiernos censuraron todo lo relacionados con esta práctica, hasta el punto de que la palabra se eliminó de las enciclopedias.
El conflicto de intereses
En el libro «Electrocultura y Energías libres» (2010), se incluye información de una confesión de un ex representante de la industria de los fertilizantes químicos que dice haber participado en una campaña de desprestigio en contra de estas técnicas. Hoy en día no parece haber cambiado mucho. Instituciones formales de investigación han olvidado por completo seguirle la pista a la electrocultura. Algunas organizaciones de investigación ni siquiera son conscientes de que han participado en ensayos a principios del siglo pasado.
Cuando se conocen las grandes influencias de los factores de la electricidad y el magnetismo en las plantas, cuando sabemos que los organismos oficiales de investigación propios han experimentado en este área antes, no es cuestionable que se aparenta un desconocimiento deliberado.
Este hecho mantiene a los agricultores y jardineros en una ignorancia organizada, lo que beneficia a los intereses de las grandes compañías de fertilizantes químicos, agroquímicos e industriales. Cuando nos preguntamos «¿quién se beneficia de la delincuencia?,» Existen indicios graves y pruebas. Sin olvidar los intereses del Estado para mantener y desarrollar la agricultura en la dirección totalmente dependiente hacia la compra de fertilizantes y fitosanitarios. Para, de esta manera, vigilar de cerca y controlar a los agricultores.
Si como agricultor usted es consciente de este conflicto de intereses que se plantea: «¿Por qué participar de esta farsa? si un agricultor tiene que gastar mucho más dinero para cultivar «adecuadamente» con productos químicos y, además, por ignorancia, contribuye a contaminar y envenenarse a si mismos y a sus conciudadanos.
Siempre hay que preguntarse quién se beneficia con el crimen para encontrar las fuentes de cualquier confabulación. En el caso de la electrocultura, los agricultores se han mantenido en la ignorancia para el beneficio de unos pocos aún en contra de su propio beneficio e interés y el de sus más allegados . No es lógico que un agricultor que ama su tierra y sus animales produzca y venda productos nocivos y tóxicos, con el fin de obtener buenas cosechas. Esto demuestra la falta de tecnologías más limpias, baratas y que salvaguarden el patrimonio de los agricultores, sus tierras, su independencia a escoger los insumos que utilizar para cultivar la tierra y cosechar los frutos de su trabajo.
Hoy, los resultados del trabajo de los agricultores son cosechados por la industria agroquímica, los productores de semilla y el estado, ya que se mantiene bajo el control, como un esclavo de los mismos organismos. Ya no tenemos que pasar por esto, todo el mundo tiene el derecho de entrar y salir de esta adicción, mediante la aplicación de técnicas agrícolas que están fuera de lo común y han sido aplicadas y adaptadas. Estas técnicas nos dirigen hacia la electrocultura, entre otras.
¿Acaso los agricultores no se cansan de ser las marionetas de esta historia?
Mientras que los agricultores y el pueblo se alimenta y se intoxica de alimentos cultivados con químicos, los accionistas de las empresas de agroquímicos y ministros de estado se alimentan de productos orgánicos.
¿Sabe usted que los ministros de agricultura y demás miembros de los gobiernos y casas reales comen orgánico?. ¿Sabe usted que los principales accionistas de Ciba y Novartis (industrias agroquímicas) tienen sus propios huertos biodinámicos, para obtener comida orgánica y sana. Mientras que explotan e intoxican a los consumidores, ganando millones con sus productos químicos, los cuales no utilizan para nada en sus huertos personales?
¿Sabe usted que los dueños de esas industrias disponen de islas en exclusive para su uso donde no aplican ninguno de los venenos que están ingiriendo o inhalando sus hijos y que ellos mismos les venden?
Si un agricultor, conociendo esta realidad, persiste en el uso de productos químicos significa que necesita un poco de tiempo para asimilar y digerir el trago amargo en el cual creía durante tantos años. Puede ser que tenga un problema neurológico, debido a toda la propaganda mediática intensiva sobre este tema. También puede ser que tenga tendencias suicidas. Según las estadísticas, cada dos días, un agricultor se suicida. Los suelos y los alimentos, el agua y el aire son envenenados intencionalmente. Algunos casos de estos salen a la palestra. Pero, la mayoría no, ya que se mueve mucho dinero entre bambalinas para que no salgan a relucir muchos intereses en juego. Además, sepa usted que los jueces mejor remunerados y sus familias también comen orgánico.
El modelo económico que se nos impone en una sociedad de consume la oferta se pone delante de las soluciones prácticas y reales. Este modelo económico de la agricultura industrial, prevé vender muchos productos fitosanitarios y fertizantes año tras año. El sistema no acepta las soluciones reales y organizadas como la electrocultura. La solución agrícola eficiente es vender productos químicos, los cuales son remedios o fertilizantes temporales, mejor dicho, miseria para comprar cada año más y más. El enfoque del «consumo» es la ventaja que tiene este modelo de negocio, el cual atenta contra los intereses de los agricultores, que no se dan cuenta de la forma en la que son manipulados y controlados desde el sistema económico actual. Esto explica claramente la ignorancia en torno a las técnicas amigables y sostenibles con el medio ambiente como la electrocultura.
Las técnicas actuales de cultivos agrícolas, usando productos químicos fitosanitarios y fertilizantes, muestran simplemente el grado de ignorancia de los profesionales en la agricultura. Sería muy triste que esto perdure en el tiempo, en vez de informarse y actuar.
Los agricultores tienen que despertar, salir del estado de coma en el que se encuentran. Están involucrados en un sistema deliberadamente manejado por pseudo expertos y técnicos igualmente ignorantes, para que el agricultor pueda disfrutar de los bancos y la industria agroquímica.
El capital real que debemos cultivar son la tierra y el suelo
Usted puede optar por hacer lo contrario, cultivar de una manera en la que va probando nuevas técnicas, las cuales permitirán restablecer un cierto grado de independencia y libertad. Esto es para el beneficio de todos nosotros. Más aún para las finanzas de los agricultores que se benefician de los resultados cada vez más independientes de su trabajo, tanto por la calidad de las cosechas que obtienen y el tiempo en que las producen. Por otra parte, también se beneficia al medio ambiente, porque se logra producir alimentos de mejor calidad con menos contaminación.
La raíz de la palabra «cultivar» significa «honor», «amor», significado muy distinto al de las palabras que utilizan ahora en este ámbitos: «operador”, «uso agrícola”, “explotación”.
Notas al margen:
“Durante mis estudios en 1999, mi profesor director de tesis me dijo: Si mantiene este tema en su tesis, no le puedo dar tu diploma».
Él tenía intereses con una gran multinacional de agroquímicos y los GMO ( alimentos genéticamente modificados), » Demon» santo….. para no nombrarlo. El decía que esto era totalmente inútil y me propuso la aberración de la tecnología transgénica en la agricultura. Le expliqué que podíamos hacerlo mejor, más controlada, más ecológico y más eficiente con el uso de ondas y frecuencias para activar la expresión de los genes de manera específica , reversible y sin contaminar los suelos con GMO, sin utilizar transgénicos. Al final tuve que eliminar esta página de mi tesis para lograr obtener mi título.
Esto demuestra la ignorancia que existe alrededor de este tema. ¿Cómo llegamos a esto? Centros Centros de investigación y escuelas agrícolas autocensuran el tema para complacer a la industria agroquímica, semillas GMO y para salvaguardar sus intereses financieros en detrimento del interés general, perjudicando a los agricultores y consumidores. Porque en última instancia, tenemos que pagar por la contaminación, las enfermedades y las facturas; para satisfacer el apetito de estos ogros industriales”.
Yannick Van Doorne. Ingeniero industrial en agricultura y biotecnología.
Fuentes:
- Para más información, contactar con Yannick Van Doorne al +336 88 08 68 94 (Francia) o al email: yannickvd11@yahoo.fr.
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https://www.youtube.com/watch?v=4cljCnf30dA&t=17s
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- Las personas de habla hispana pueden contactarse con Andrés López Cordero al +5939 9966 0983(Ecuador) o al email: alopezcordero85@gmail.com. Les puede proveer con el equipo que elija o asistir en la instalación, manejo y práctica, así como imparter conferencias sobre todas estas técnicas:
- Antenas magnéticas de cera de abeja. Técnica de Magnetocultura.
- Fertilizador electromagnético, tipo Christofleau.
- Torres Paramagnéticas fertilizantes: transmisor de ondas de frecuencias naturales, como las ondas Schuman.
- Fertilizador solar, pequeño panel solar para la estimulación eléctrica del suelo.
- Antenas de generación de ondas Schumann
- Dinamizador electrónico de semillas.
- Invento Electromagnético, que transfiere un Electroflash de fertilizante hacia el suelo o en un spray de agua.
- Cambios del tipo de agua Marcel Violet.
- Procesar aparatos de irrigación o spray de agua, mediante un sistema puntiagudo pasivo. Energetización del agua. Previene el escalamiento. Previene la asfixia del suelo. Mejora la disponibilidad y absorción de nutrientes. Incrementa el enraizamiento y crecimiento de plantas.
- Agnihotra: Técnicas simples y efectivas que inspiraron las técnicas Biodinámicas Aryurvédicas.
- Pirámides que impulsan a las semillas del huerto, construcción de invernaderos pirámide, equipos para pirámides.
- Imanes de diferentes medidas para electrocultura.
- Antenas de aire de Géomagnétifère o del tipo électrovégétomètre.
- Dispositivo para electrocultura Lee Crock.
- Generador de ondas escalares, consiste en imanes, para tratar y acelerar el crecimiento de las plantas.
- Antena en forma de caracol, modificada pedir al pie de las plantas.
- Circuitos de anillos Lakhovsky, para plantas y árboles.
- Aplicaciones de frecuencia de sonidos, plantas y música: musiquesplantes.com
*Esta publicación es el resultado de una traducción libre y resumida de varios textos y conferencias de Yannick Van Doorne.
* Más info: https://www.youtube.com/live/MOpjBGBBbpA?si=pelCXedXKlSNALdT
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